El presente trabajo trata de llamar la atención sobre el giro epistemológico que acompaña al nacimiento del pensamiento moderno. A tal fin se utilizan, como hilo conductor, los sueños decisivos que Descartes experimentó a los 23 años. Dichos sueños nos permiten visualizar un progresivo tránsito desde la oscuridad onírica a la luz racional que es concomitante con un tránsito desde el ocultismo (vigoroso en el Renacimiento) al racionalismo. De ese modo se esclarece por qué, si bien, como indica Hegel, hay elementos de la filosofía moderna que se anuncian en Böhme o en Francis Bacon, esta no encuentra su punto de anclaje hasta llegar a Descartes, punto que anuda la centralidad del sujeto a un giro epistémico destinado a exiliar del discurso científico tanto el lenguaje cualitativo del aristotelismo como el lenguaje emotivo del hermetismo.
This paper tries to draw attention to the epistemological turn that accompanies the birth of modern thought. To this end, the decisive dreams that Descartes experienced at the age of 23 are used as a common thread. These dreams allow us to visualize a progressive transition from oneiric darkness to rational light that is concomitant with a transition from occultism (vigorous in the Renaissance) to rationalism. In this way, it is clarified why, although, as Hegel indicates, there are elements of modern philosophy that are announced in Böhme or in Francis Bacon, this does not find its anchoring point until it reaches Descartes, a point that ties the centrality of the subject to an epistemic turn destined to exile from scientific discourse both the qualitative language of Aristotelianism and the emotive language of Hermeticism.