Jesper Tvevad
Las recientes elecciones al Parlamento Europeo (PE) han desplazado el equilibrio político en la cámara hacia la derecha, aunque el ascenso de los partidos considerados de extrema derecha ha sido menor de lo pronosticado. Considerando que las posiciones del PE sobre la región latinoamericana normalmente han sido apoyadas por amplias mayorías, es menos probable que la composición del nuevo parlamento modifique sustancialmente sus posiciones hacia las políticas de la UE con respecto a América Latina. Sin embargo, el mayor peso de los grupos de centro-derecha y de derecha podría llevar al parlamento a adoptar una línea aún más contundente y crítica con algunos gobiernos de América Latina, en primer lugar Cuba, Nicaragua y Venezuela. Asimismo, una postura más crítica hacia las políticas climáticas y medioambientales del «Pacto Verde» podría debilitar el apoyo del parlamento a un área prioritaria de la cooperación birregional.
The recent European Parliament (EP) elections have shifted the political balance in the chamber to the right, although the rise of parties considered far-right has been less than predicted. Considering that the EP’s positions on the Latin American region have normally been supported by large majorities, the composition of the new parliament is less likely to substantially alter the parliament’s positions on the EU policies towards Latin America. However, the increased weight of centre-right and right-wing groups could lead the parliament to adopt an even stronger and more critical line towards some Latin American governments, first and foremost Cuba, Nicaragua and Venezuela. Furthermore, a more critical stance towards the climate and environmental policies of the ‘Green Deal’ could weaken the parliament’s support for a priority area of bi-regional cooperation.