Ethekwini, Sudáfrica
Este artículo está basado en Critical Diversity Literacy (CDL) para analizar las expresiones narrativas de las experiencias de un maestro negro sudafricano en momentos de exclusión (valles) e inclusión (crestas) después de veinte años de servicio en dos escuelas predominantemente blancas independientes. Los datos fueron generados por una maestra sudafricana a la que se le pidió que reflexionara sobre las crestas [momentos inclusivos que merecen ser acogidos y celebrados] y los valles [momentos de exclusión que buscan asimilar o ignorar la diversidad] en su viaje de enseñanza que abarca dos décadas en dos escuelas. Usando el paradigma interpretativa, intentamos comprender el viaje del maestro que muestra que los agentes de exclusión con tendencias de exigir el cumplimiento y la asimilación posterior, incluyen otros maestros, líderes escolares, estudiantes y algunos padres. Sin embargo, la maestra tiene la oportunidad de leer la situación y puede, dependiendo de su agencia, trabajar para eludir las tendencias opresivas y excluyentes. Las crestas que celebran la diversidad se observaron en su segunda escuela. Llegamos a la conclusión de que la diversidad sigue siendo de múltiples perspectivas y, por lo tanto, debe tenerse en cuenta la simultaneidad cuando se trata de la inclusión en la fraternidad de enseñanza.
The current article draws from Critical Diversity Literacy (CDL) to analyse narrative expressions of a black South African teacher’s experiences of moments of exclusion (troughs) and inclusion (crests) after twenty years of service in two predominantly white independent schools. Data was generated from one South African teacher who was prompted to reflect on crests [inclusive moments that deserve to be embraced and celebrated] and troughs [moments of exclusion that seek to assimilate/ignore diversity] in her teaching journey spanning two decades at two independent schools. Using the interpretivist paradigm, we attempt to understand the teacher’s journey which shows amongst others, that agents of exclusion with tendencies to demand compliance and subsequent assimilation, include other teachers, school leaders, learners as well as some parents. The teacher was however, provided with an opportunity to read the situation and may, depending on her agency, work to circumvent oppressive and exclusionary tendencies. Crests celebrating diversity were noted in her second school. I conclude that diversity remains multi-perspectival and therefore simultaneity should be borne in mind when dealing with inclusion in the teaching fraternity.